Ahora los estudios con los monos muestran que ellos tambien son capaces de adquirir modulaciones de calibres diferentes, algo que los científicos creían hasta ahora era solamente una particularidad de la laringe y la lengua humanas en combinación.
Los zoólogos creen que la necesidad de comunicarse entre ellos en un ambiente harto bullicioso, ha estimulado el desarrollo particular de sonidos únicos constante. “Los requerimientos ecológicos y sociales obligaron a los gibones, a utilizar una técnica de soprano para producir la voz de tonos puros y fuertes“, afirma Nishimura, recordando que los cantantes de ópera aprenden a cambiar sus rangos vocales para que sus tonos agudos sean de mayor potencia.
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